Más de 30 personas participaron en el curso de empaquetado que se celebraró este lunes, día 9 de mayo, organizado por ACISA Ribadeo. Fue impartido por Lara Blanco quien asegura que el envoltorio es el gran olvidado muchas veces en el comercio.
Lara Blanco detalla que “se hicieron dos talleres, uno de mañana y otro de tarde. Los dos tuvieron el mismo contenido y con una duración cada uno de unas tres horas. En ese tiempo se hizo una parte teórica para introducir un poco la importancia de porqué invertir tiempo en envolver nuestros regalos a la hora de hacer una venta en el comercio, de dónde viene la tradición de envolver los regalos, en qué debemos fijarnos, una coherencia entre nuestro producto y el envoltorio que hacemos en él. De manera introductoria también se explicó un poco el tipo de papeles y cintas, qué expresa cada tipo de cinta, pues unas son más lujosas y otras más económicos, cuáles debemos escoger en función del producto y de la imagen de nuestra tienda”.
Lara Blanco añade que “en la segunda parte nos dedicamos directamente a la práctica, que es lo que busca más el asistente. La formación práctica nos ocupó unas dos horas y ahí nos vamos a meter en envolver cajas, que siempre parece lo más sencillo pero nos ofrece muchas posibilidades. Veremos la cantidad de papel que hay que usar para no malgastar y vamos a ir añadiendo dificultad para que el asistente en función del tiempo que tenga a la hora de envolver pueda decidir si hace un empaquetado más elaborado o más sencillo”.
La responsable de Empaquetando Ando destaca la importancia de este curso ya que “así como podemos tener mucha información de otros temas, el envoltorio sigue siendo una asignatura pendiente, es algo que queda como en segundo plano. Nos centramos mucho en realizar la venta, que es muy importante, pero no nos damos cuenta de que el envoltorio está expresando cómo es nuestra tienda. Una persona que no nos conozca cuando recibe un regalo se está llevando una imagen, sabe si somos detallistas y si nos importa esa persona”.
Respecto a la asistencia a este curso, que contó con 32 participantes, Lara Blanco manifiesta que “estamos muy contentos porque nos demuestra que el comercio está implicado en perfeccionarse, en seguir mejorando. Encantados de que la gente se anime a venir a aprender cosas nuevas, dice mucho de que hay una intención muy buena de cara a prestar un mejor servicio al cliente”.